Con su puesto en duda, García Mansilla firmó su primer fallo en la Corte

Después de avalar varias resoluciones administrativas, el nuevo juez Manuel García Mansilla debutó con un fallo en la Corte Suprema. Esto sucede a dos semanas de que el Senado trate su pliego para ratificar o invalidar su designación por decreto.
García Mansilla suscribió una decisión para dejar sin efecto un fallo de la Corte Suprema de Córdoba, que le había bajado la pena a un condenado por narcomenudeo. El imputado había sido sentenciado a 4 años de cárcel y una multa, pero la Corte provincial le redujo la pena a 3 años de prisión en suspenso porque sostuvo que hay una distinción entre la comercialización de drogas en gran volumen y la venta para consumo personal. En ese sentido, los jueces cordobeses afirmaron que el Congreso cometió un error al no hacer esta distinción en la escala penal.
Sin embargo, la decisión fue apelada por el fiscal de Córdoba y tanto García Mansilla como sus compañeros de tribunal -Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti- coincidieron en revocar esa reducción de la pena.
En sus primeros argumentos en la Corte, García Mansilla explicó que es el Congreso el que fija las escalas penales y que esas decisiones deben ser respetadas por los otros poderes del Estado y no pueden ser cuestionadas por los jueces.
La designación por decreto y en comisión de García Mansilla y de Ariel Lijo, que todavía no asumió en la Corte, será debatida por el Senado el próximo 3 de abril. Ese día, se requerirá el voto positivo de dos tercios de los senadores presentes para ratificar los nombramientos. Si la Cámara Alta rechaza los pliegos, el juez, que acaba de debutar en el Máximo Tribunal, deberá dar un paso al costado.