Tras dos años de investigación, empezó el juicio al Juez Bento
El juez federal de Mendoza, Walter Bento, cambió de lugar en la sala y pasó a estar en el banquillo de los acusados. Este miércoles empezó el juicio en su contra por cobrar coimas millonarias para favorecer a presos a través de fallos judiciales.
Bento está acusado con otras 30 personas, entre los que están su esposa y sus hijos, por los delitos de cohecho activo, lavado y enriquecimiento ilícito. Además lo imputan por violación de deberes de funcionario público y falso testimonio. El juez, que está suspendido en sus funciones pero aún no fue removido por un jury, es señalado como el jefe de la asociación ilícita y llegó al juicio libre por tener fueros.
El requerimiento de elevación a juicio tiene 865 hojas y se especula con que se demorará aproximadamente 8 días en leerlo. Una de las pruebas que se expusieron hoy fue la nómina de llamadas por Télegram entre uno de los imputados, el empresario Diego Aliaga, ya fallecido, y Bento. Fueron 275 llamadas en 7 meses. Y la acusación destacó que “el juez utilizaba su celular para coordinar el pago de sobornos».
En su informe la fiscalía detalló que el juez otorgaba beneficios procesales, generalmente sobreseimientos, a personas acusadas por delitos federales como contrabando y narcotráfico. A cambio cobraba sobornos pagados en dólares o con bienes inmuebles o automóviles. De la organización también participaban abogados y policías.
Bento fue nombrado durante el gobierno de Néstor Kirchner y siempre contó con apoyo político. En 2011 ordenó un allanamiento con Gendarmería en Cablevisión en pleno auge del conflicto entre el gobierno de Cristina Kirchner y el Grupo Clarín. La Corte Suprema anuló su intervención y Bento fue denunciado en el Consejo de la Magistratura pero salió airoso por intervención del kirchnerismo.
Para este juicio, Bento cambió de abogado. Será representado por Mariano Fragueiro Frías, que ya anticipó que el juez sostiene que es una causa armada y que va a hablar durante el proceso.