Con Cristina otra vez en el banquillo, arrancó el juicio por la Causa Cuadernos
Este jueves empezó finalmente el juicio por la Causa Cuadernos, que investiga un entramado de corrupción montado durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner y que podría sumarle a la expresidenta una nueva condena.
El proceso se desarrollará ante el Tribunal Oral Federal N°7 y juzgará a más de 70 imputados, entre ellos Cristina, Julio De Vido, José López, Roberto Baratta y el exchofer Oscar Centeno, cuyas anotaciones dieron origen a la investigación, además de varios empresarios involucrados.
La causa reveló un supuesto sistema de recaudación ilegal de fondos mediante el pago de coimas a cambio de contratos de obra pública. De acuerdo con la fiscalía, el dinero «era entregado alternativamente a los titulares del Poder Ejecutivo Nacional o sus secretarios privados en Uruguay 1306 y Juncal 1411 –domicilio particular de Néstor y Cristina Kirchner–, en la Quinta de Olivos o en la Casa de Gobierno», y parte de esos fondos se redistribuía entre otros funcionarios.
En su acusación, los fiscales sostuvieron que los imputados «integraron una asociación ilícita que desarrolló sus actividades al menos desde mayo de 2003 hasta noviembre de 2015, y cuya finalidad fue organizar un sistema de recaudación de fondos ilícitos con el fin de enriquecerse ilegalmente y de utilizar parte de esos fondos en la comisión de otros delitos».
Cristina Kirchner llega a este juicio como presunta jefa de esa asociación ilícita, acusada de recibir dinero a través de intermediarios. El exministro de Planificación Julio De Vido es señalado como el organizador del circuito de sobornos, responsable de supervisar los contratos de obra pública. Roberto Baratta, su mano derecha, habría sido el encargado de recolectar las coimas junto a Oscar Centeno, el chofer que registró en sus cuadernos cada viaje y entrega de dinero.
Otro de los acusados es José López, exsecretario de Obras Públicas —recordado por los bolsos con dólares en un convento—, que reconoció haber participado del sistema y figura entre los arrepentidos del caso.
La Causa Cuadernos se distingue, además, por la cantidad de empresarios que admitieron haber pagado coimas al gobierno kirchnerista para acceder a contratos y beneficios. Entre ellos figuran Ángelo Calcaterra, Aldo Roggio , Carlos Wagner, Gerardo Ferreyra , Hugo Eurnekian y Enrique Pescarmona.
Las confesiones describen una trama de cartelización de licitaciones, sobornos por represas, concesiones aeroportuarias y subsidios energéticos, consolidando la hipótesis de la fiscalía sobre un sistema estructurado y sostenido durante más de una década.
Con este proceso, Cristina Kirchner enfrenta su segundo juicio oral por corrupción, luego de haber sido condenada en la Causa Vialidad por fraude en la obra pública. Si el Tribunal considera probadas las acusaciones, la expresidenta podría sumar una nueva condena que profundice su complicada situación judicial.