Los puntos oscuros del nuevo régimen
Defiéndase.com consultó a Pedro Kesselman, especialista en asuntos laborales, para que echase luz sobre las dudas que plantea para empleadores y empleados, la aplicación de este nuevo sistema de tickets. Y agregó que «esto no va a salir nunca».
¿Puede la empresa negarle el ticket a un empleado, si ya lo recibió una vez? No. Si el empleador le otorgó el beneficio, después no se lo va a poder quitar. El trabajador puede, el día de mañana, reclamar que se le mantenga este subsidio porque lo considera un derecho adquirido propio. Al ser una prestación alimentaria, forma parte de la intangibilidad del crédito alimentario. Puede ocurrir también que el empleador se lo deje de otorgar y el empleado no lo reclame por un tiempo (dos o tres meses). En ese caso, ateniéndonos a la jurisprudencia existente se considera que, el trabajador al no reclamarlo ha consentido la quita del beneficio. Si el sueldo del empleado supera el techo de los 1500 pesos fijados para dar los tickets, ¿la empresa podrá quitárselos? Tampoco. En el decreto dice que solo rige para los que ganan hasta 1500 pesos. Pero si mañana al empleado le aumentan el sueldo a 1600, la empresa no va a poder quitarle el plus que le había dado. El empleado podrá alegar que le corresponde y que no lo pueden privar de recibirlo so pretexto de un aumento del sueldo. Quiero ser claro en esto: una vez que se le otorgó la prestación, (que no configura salario porque no se deducen de éste los aportes) ya queda incorporada como patrimonio del empleado. Salvo que – pero esto ya es Argentina año verde – después salga una norma que establezca un aumento salarial masivo, como alguna vez existió en el país, y entonces sí quedaría sin efecto el derecho de seguir cobrando el ticket. Pero sabemos bien que esto no va a suceder. ¿Está a favor o en contra de este aumento ´en especie´? Creo que esto es un retroceso en materia laboral; se vuelve al viejo sistema que imperaba en los ingenios en las provincias años atrás, cuando los patrones pagaban con bonos y los obreros no tenían otro remedio que cambiarlos en los almacenes de la empresa. Acá es parecido: al empleado le dan un ticket para que después lo cambie en un determinado comercio y no en el que a él se le ocurre. Para colmo, estos tickets, al estar liberados de aportes, no contribuyen al sistema de seguridad social que día a día se está vaciando. Por eso es lógico que, entre el trabajo en negro, el desempleo, las rebajas salariales, el montón de exenciones de aportes patronales y, ahora los tickets, se haya llegado a la quiebra del sistema prestacional. ¿Qué futuro le augura a los nuevos tickets? Veo muy difícil que esto pueda llegar alguna vez a ponerse en práctica. Al ser optativo, ¿qué empresa va a meterse en el lío de darle algo al empleado que después no le va a poder quitar?. Sobre todo teniendo en cuenta la crisis actual, en donde todos los días una fábrica baja la cortina y más trabajadores quedan en la calle. Aún falta reglamentar el decreto. Ahí van a aparecer más dificultades de las que hoy se plantean. De todas maneras, esto es como hablar del sexo de los ángeles. Yo creo que no va a salir nunca.